La vasija de 3000 años de antigüedad, fragmentada, fue desenterrada hace varios años en un sitio arqueológico cerca de Khirbet Qeiyafa en el valle de Elah, al suroeste de Jerusalén. Los resultados de su estudio fueron recientemente publicados.
"Las letras escritas en la antigua escritura cananea encontradas en varios tiestos despertaron nuestra curiosidad", dijo el arqueólogo de la Autoridad de Antigüedades de Israel, Saar Ganor. “La restauración intensiva resolvió el enigma: en la vasija estaba grabada la inscripción Eshbaʽal ben Badaʽ”.
“Esta es la primera vez que el nombre Eshbaʽal aparece en una inscripción antigua en Israel”, dijeron el profesor Yosef Garfinkel de la Universidad Hebrea y el Dr. Saar Ganor de la Autoridad de Antigüedades de Israel.
Eshba'al es (en hebreo) el nombre del hijo del rey Saúl, quien gobernó brevemente sobre Israel al mismo tiempo que el rey David. Esa historia se conoce por el texto bíblico, donde se indica que Eshba'al fue asesinado y decapitado. Su cabeza fue llevada a David en Hebrón (2 Samuel: 3-4)”.
“Es digno de mención que el nombre Eshbaʽal se menciona en la Biblia y ahora también en el registro arqueológico y sólo durante la época del reinado del rey David, en la primera mitad del siglo 9 aec. Este nombre no aparece más tarde en el período del Primer Templo”, dijeron los expertos.
“La correlación entre la fuente bíblica y el hallazgo arqueológico sugiere que este nombre sólo era común en este período mencionado”, agregaron, subrayando que el hecho de que el nombre de Eshba'al estuviera grabado en una vasija sugiere que era una persona importante.
Por otra parte, el nombre Bedaʽ es único y no aparece en inscripciones antiguas ni en la Biblia.